Esta parte de a continuación es la que más me ha gustado del libro. Yo nunca he sido una zoquete, desde pequeña se me ha inculcado el valor del trabajo y la satisfacción de realizar las cosas bien, por lo que en ese aspecto no me siento identificada con el libro Sin embargo si me siento, en parte, identificada con esta parte, or lo que es mi favorita.
"Pierdes
de vista a una chiquilla en secundaria, nula, nula, nula como ella misma dice
(«¡Pero qué nulidad era!»), y veinte años más tarde una mujer joven se dirige a
ti en una calle de Ajaccio, radiante, sentada en la terraza de un café:
—¡Señor,
No toquéis el hombro del jinete que pasa!
Te
detienes, te das la vuelta, la mujer te sonríe y le recitas la continuación de L'allée,
ese poema de Supervielle que aparentemente ambos conocéis:
Se
daría la vuelta
y
sería de noche,
una
noche sin estrellas,
sin
curva ni nube.
Ella
suelta una carcajada, pregunta:
—¿Qué
sería entonces
de
todo lo que hace el cielo,
la
luna y su pasar
y
el ruido del sol?
Y
respondes a la niña que ha reaparecido en la sonrisa de la mujer, a la niña
reticente a la que en el pasado le enseñaste; el poema:
—Tendríais
que aguardar
que
un segundo
tan
poderoso como el otro
aceptara
pasar"
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